La seguridad social, es un elemento fundamental que incide en la paz de un país. De ahí la necesidad de que todas las naciones del mundo estén preocupadas, por incorporar e incentivar políticas y programas que tiendan a proteger a sus ciudadanos buscando siempre ampliar la cobertura y las prestaciones que se otorguen en sus países. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidades (ONU), más de la mitad de la población mundial no tiene acceso a servicios de atención sanitaria básica y solo 29%cuenta con plena cobertura de seguridad social. A escala mundial, solo 68% de las personas en edad de jubilación percibe algún tipo de pensión, y en muchos países con bajos niveles de ingresos esa proporción es de 20%. La desigualdad que existe en todos los países, respecto de los ingresos que perciben las personas –en unos países más y en otros menos, pero Las cuotas de pago mensual se determinarán aplicando las primas financieras que corresponden al salario mensual determinado Síntesis En nuestro país, el Instituto Mexicano del Seguro Social representa la columna vertebral de la seguridad social, por eso resulta importante resaltar que no solo asegura a la población trabajadora, sino que tiene la visión de ser un organismo incluyente, ya que existen diversas modalidades de aseguramiento para otro tipo de personas y segmentos de la población. L.C. y PCFI Arturo Luna López Integrante de la Comisión Representativa ante Organismos de Seguridad Social (CROSS) del IMCP Socio director de Arturo Luna Fuentes y Asociados, S.C. aluna@alfsc.com.mx Programa piloto del IMSS para trabajadores independientes esta situación afecta a todos ellos, tanto del primer mundo como a los países en vías de desarrollo y países más pobres– es un problema de no fácil solución, por depender de muchos factores. A escala mundial, en 2017, más de 700 millones de trabajadores vivían en la pobreza extrema (menos de 1.90 dólares al día) o en la pobreza moderada (menos de 3.10 dólares). Obvio que estas personas viven con carencias de todo tipo, lo cual les es imposible contar con los servicios básicos y elementales con que cualquier persona debe de gozar de acuerdo con su condición humana. Según las estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), institución que cumplió su centenario de creación en 1919, solo 29% de la población mundial tiene acceso a sistemas de seguridad social plenos y 55% carece de ámbitos de protección. Ante estos problemas cada nación, dentro de sus políticas busca mecanismos adecuados para poder reducir la falta de seguridad social en su territorio, buscando o estableciendo mecanismos que puedan reducir el número de personas que se encuentran sin protección, ya sea financiando los programas con impuestos, o bien permitiendo el acceso a la seguridad social, con un costo a cargo de los beneficiarios. En México los trabajadores que participan de la economía informal, que suman 55.2 millones de personas a 2021 de acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), carecen de seguridad social y son personas que perciben bajos ingresos. Como sabemos, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) representa la columna vertebral de la seguridad social, por eso resulta importante resaltar que no solo asegura a la población trabajadora, sino que tiene la visión de ser un organismo incluyente, ya que existen diversas modalidades de aseguramiento para otro tipo de personas y segmentos de la población. El IMSS ha demostrado que tiene la convicción de abrir sus puertas, cada vez más, a un mayor número de personas que trabajan por su cuenta y esto se demuestra con varias modalidades que prevé la ley, y en otros casos, por medio de programas piloto como el que inició en 2019 (por orden de la Suprema Corte de Justicia de la Nación [SCJN]), con el programa para trabajadores del hogar y recientemente con el programa piloto para trabajadores independientes, que es nuestro tema central a tratar. Con los antecedentes anteriores, en el año de 2021 el IMSS publicó el acuerdo número ACDO.AS2.HCT. 260820/216.P.DIR, dictado por el H. Consejo Técnico, por el que se aprueban las reglas de carácter general del esquema simplificado para la incorporación voluntaria al Régimen Obligatorio del Seguro Social de personas trabajadoras independientes. Con esta modalidad, ahora se podrá tener acceso sin contar con un patrón, a la cobertura de los seguros de: Enfermedades y Maternidad, Riesgos de Trabajo, Invalidez y Vida, Retiro, Cesantía en Edad Avanzada y Vejez y Guarderías y Prestaciones Sociales. Esta modalidad ofrece a los trabajadores independientes la posibilidad para todas aquellas personas, que en el pasado no podían inscribirse en el Seguro Social por no ser sujetos de aseguramiento, de que ahora lo puedan hacer por medio de este programa piloto, aprobado por el Consejo Técnico del IMSS. Si bien, conocemos que en el régimen obligatorio (artículo 13 de la ley) se permiten varias modalidades, en donde las personas pueden acceder a coberturas de aseguramiento, de manera voluntaria, pudiendo tener ciertas coberturas por ejemplo; en la modalidad 33 “Seguro de Salud para la Familia”, que se refiere a la inscripción de manera voluntaria, al seguro de salud, que al no contar con un empleo o porque trabajan por su cuenta, desean estar asegurados en el ramo de atención médica, donde se otorgan los DOSSIER 22 CONTADURÍA PÚBLICA 23
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