de involucramiento o “engagement”, que fue establecida por Nixon a principios de los años setenta y que funcionó exitosamente durante casi cinco décadas, parece haber llegado a su fin. Esta política está siendo sustituida por un enfrentamiento mucho más directo y por una competencia mucho más abierta. Por otro lado, hoy los factores de interdependencia entre ambos países siguen siendo muy significativos. Su comercio bilateral alcanzó 615,000 millones de dólares en 2020, mientras que la inversión extranjera llegó a 162,000 millones de dólares en ese mismo año. Existen varios temas que pueden escalar el nivel del conflicto entre ambos países. Hong Kong y Taiwán son dos buenos ejemplos de temas críticos que aún están por resolverse. También hay que recordar que tanto EE. UU. como China cuentan con capacidades nucleares muy importantes, por lo que es fundamental que la diplomacia siempre impere en esta relación. Muchos analistas opinan que la Guerra Fría entre ambos países ya es una realidad y que actualmente estamos en una etapa de trabajo diplomático para prevenir que esa guerra fría se convierta en una guerra caliente. Democracia vs. Autoritarismo Según un reporte de la organización IDEA (International Institute for Democracy and Electoral Assistance), las democracias en el mundo han ido perdiendo terreno en los últimos diez años. Países como Hungría, Polonia, Venezuela, Nicaragua o Turquía han ido construyendo gradualmente sistemas más autoritarios. De acuerdo con estimaciones de IDEA, dos terceras partes del mundo vive en democracias altamente frágiles o en regímenes que han acelerado abiertamente su regresión al autoritarismo. Con el pretexto de la pandemia, muchos países han buscado formas de reducir libertades, impactar negativamente el rol de la prensa, disminuir el papel de la sociedad civil y de sus organismos terminará ese ciclo alcista. En octubre de 2021, la empresa de autos eléctricos Rivian salió a Bolsa con una capitalización de mercado de 125 mil millones de dólares, esto sin haber entregado un solo coche. ¿Exuberancia irracional? Y en el caso de China habrá que estar muy atentos a su sector inmobiliario, el cual ha sido afectado por temas de sobre-endeudamiento, como el caso específico de Evergrande y otras empresas que será muy difícil que cumplan con sus compromisos financieros. Algunas quiebras en este sector podrían desencadenar un efecto dominó en otros sectores. Inflación 2021 es el año en el que la inflación se convirtió en un problema global. Las principales economías del mundo, tanto desarrolladas como emergentes, están registrando tasas de inflación muy por encima de la tasa objetivo de sus Bancos Centrales. Existe un consenso generalizado en el sentido de que la causa raíz detrás del problema de inflación es la combinación entre una recuperación económica rápida, del lado de la demanda, y una recuperación económica lenta y no tan eficiente del lado de la oferta, agravados también por los problemas logísticos registrados en este año. La gran pregunta es si estas presiones inflacionarias serán temporales o permanentes. La respuesta de los Bancos Centrales tendrá que ser muy efectiva y bien ejecutada. Si suben las tasas de interés demasiado rápido, podrían impactar negativamente a la recuperación económica, pero si lo hacen demasiado lento, el problema de inflación podría salirse de control. Hacia 2022 veremos qué tan certeros son los Bancos Centrales para resolver este problema. Cambio climático 2021 fue el año de la COP26 en Glasgow, Escocia. Estimaciones recientes indican que el cambio climático podría crear condiciones de vida casi insostenibles para tres mil millones de personas en los próximos treinta años. Según un reporte reciente del Global Systems Institute de Exeter University (UK), cada incremento de un grado centígrado en la temperatura del planeta tendría un impacto directo en la calidad de vida de mil millones de personas. Aunque desde el punto de vista mediático la mayoría de los analistas considera que la COP26 fue un éxito, desde el punto de vista de acciones reales para detener la trayectoria del cambio climático realmente no se logró algo materialmente importante. Eventos climáticos extremos como huracanes, incendios, sequías e inundaciones seguirán siendo recurrentes en diferentes lugares del planeta, con un impacto muy importante en las actividades productivas humanas y en algunas industrias en particular, como es la industria de seguros y la agrícola. Otra tendencia será reducir el grado de influencia y de poder económico de algunas empresas de tecnología, principalmente en EE.UU. y China independientes, así como de eliminar transparencia al gobernar. A escala global la democracia se ha quedado sin su principal promotor y representante. De acuerdo con una encuesta reciente del Pew Research Center, casi 80%de los entrevistados a escala global afirmaron que EE. UU. ya no tiene la credibilidad necesaria para ser un ejemplo positivo de democracia. Y la reputación de la democracia como forma de gobierno también ha sufrido descrédito debido a la falta de resultados claros para resolver los problemas de la gente. Para muchos ciudadanos tanto en países desarrollados como emergentes, democracia es sinónimo de elecciones inútiles, candidatos poco calificados, mentiras electorales, votantes sin información o criterio, además de acciones inútiles de corto plazo por encima de soluciones bien pensadas para el largo plazo. Es posible que en 2022 sigamos viendo un debilitamiento gradual de la democracia en el mundo. Burbujas de activos Hay dos factores que podrían estar alimentando la creación de burbujas de activos en el mundo: la importante inyección de liquidez por medio de Bancos Centrales y el largo periodo de tiempo en que las tasas de interés han permanecido en niveles bajos. En una nota publicada hacia finales de año, Morgan Stanley exponía su preocupación sobre un posible “divorcio” entre las políticas de la Reserva Federal y los fundamentales de la economía de EE.UU. En 60 años, el diferencial entre la tasa de referencia de la Reserva Federal (Fed Funds Rate) y el indicador de inflación (Consumer Price Index) no había sido tan amplio (casi 5%), lo que significa que las tasas de interés se han quedado demasiado rezagadas en relación con la inflación. Mientras tanto, los mercados financieros en EE.UU. siguen rompiendo niveles récord todos los días y la pregunta es cuándo y cómo Futuro del trabajo La evolución del futuro del trabajo continuará de forma acelerada conforme vamos saliendo de la pandemia. Algunas tendencias se consolidarán, por ejemplo, más organizaciones adaptarán modelos híbridos en los que sus trabajadores podrán decidir cuándo ir a la oficina y cuándo trabajar desde casa. Esto llevará a que las organizaciones reconsideren sus inversiones en espacios físicos, vendiendo o reconvirtiendo algunos de sus inmuebles o simplemente dejando de rentar algunos espacios. Las empresas también enfrentarán mayores retos para atraer talento. Esto ya era un problema incluso antes de la pandemia, pero actualmente muchos trabajadores están reevaluando sus prioridades y algunos simplemente se han cansado de trabajar en una oficina, haciendo más difícil la contratación del talento adecuado. Hacia finales de 2021, un número récord de empleados en EE. UU. (más de cuatro millones tan solo en septiembre) renunciaron a sus trabajos. Este fenómeno, llamado “The Great Resignation”, podría continuar hacia 2022. Otra tendencia importante será que las empresas comenzarán a enfocarse mucho más en capacidades y habilidades específicas más que en títulos profesionales o en puestos o responsabilidades anteriores. Los empleados tendrán que buscar fortalecer sus habilidades y competencias más que confiar en haber ocupado un puesto relevante en el pasado o en tener un diploma para poder conseguir un empleo. Finalmente, veremos que las diferencias entre los trabajadores del conocimiento y los trabajadores de línea se harán incluso más grandes, acentuando los problemas de desigualdad, así como creando nuevos retos, por ejemplo, cómo monitorear a los empleados que deciden trabajar de casa para asegurar que la productividad, el compromiso y el sentido de permanencia sigan vigentes. Empresas de tecnología Otra tendencia que cobrará fuerza en 2022 será reducir el grado de influencia y de poder económico de algunas empresas de tecnología, principalmente en EE.UU. y en China. Con capitalizaciones de mercado que ahora exceden el trillón de dólares americanos, el gobierno de EE.UU. teme que empresas como Tesla, Amazon, Google o Microsoft puedan alcanzar demasiado poder económico y político, incluso por encima del propio Estado que las regula. El Congreso Americano ya propuso una legislación específica (American Innovation and Choice Online Act) para tratar de reducir el poder y la influencia de este tipo de empresas. Del otro lado del mundo, China también ha comenzado a jugar un papel más activo en la relación con sus empresas de tecnología. Ha interferido abiertamente en algunas ofertas públicas iniciales, quitó iniciativa y visibilidad a Jack Ma –uno de los principales representantes del sector tecnológico DOSSIER 24 CONTADURÍA PÚBLICA 25
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