C.P.C. Carlos Enrique Pacheco Coello
Integrante de la Comisión de Revista IMCP
pcoello@audy.mx
P.C.P. Ángel Israel Mena Rodríguez
Contador Fiscal de Cabos Marinos del Sureste, S.A. de C.V.
angel_theprofesor@hotmail.com
La gestión estratégica en el sector público involucra al Estado que debe procurar el bienestar de toda la comunidad con educación, salud, seguridad, entre otros
La gestión estratégica en el sector público difiere del sector privado porque no tiene como límites satisfacer como facilitador a un sector en particular, sino que involucra, de forma directa e indirecta, al Estado que debe procurar el bienestar de toda la comunidad, lo cual implica, entre otras cosas:
- Servicios comunitarios.
- Educación.
- Infraestructura (carreteras, energía eléctrica, agua potable, etcétera).
- Salud.
- Seguridad.
Lo anterior entraña que el Estado para lograr el bienestar se cognize en tres gestores (poderes en unión), pero con funciones distintas:
- El Poder Legislativo. Que aprueba leyes con apego a la Constitución Política Mexicana.
- El Poder Judicial. Que vigila la correcta aplicación de las leyes.
- El Poder Ejecutivo. Que ejecuta las acciones para lograr el bienestar.
Las leyes se pueden traducir como el marco estratégico que se convierten en “políticas públicas” diseñadas para el cumplimiento de la misión que el Estado les confiere a los servidores públicos investidos de los poderes antes mencionados en sus tres niveles:
- Federal.
- Estatal.
- Municipal.
Las políticas públicas son las acciones de gobierno; es decir, del gobierno en acción que busca dar respuestas a las diversas demandas de la sociedad y se puede entender como el uso estratégico de recursos para aliviar los problemas nacionales.
Conforme a los avances logrados en la contabilidad fiscal, las principales cuentas gubernamentales que pueden prepararse son:
- Las del presupuesto administrativo o convencional del gobierno.
- La del gobierno general dentro del esquema de las cuentas de ingresos y producto nacionales.
- Las del sector gobierno dentro de la matriz de transacciones inter-industriales de insumo producto.
- La del gobierno en el esquema de fuentes y usos de fondos.
- La del sector gobierno dentro de los esquemas de la riqueza nacional.
La mayor parte de las transacciones gubernamentales se realiza mediante los presupuestos administrativos o convencionales anuales.
CLASIFICACIÓN DE LAS CUENTAS DEL PRESUPUESTO GUBERNAMENTAL
En realidad, el presupuesto gubernamental abarca todo el sector público y debería presentarse en términos consolidados.
Para la planificación de las cuentas presupuestarias, deben considerarse los cuatro propósitos fundamentales de dichas cuentas:
- Primero. Deben estructurarse de manera que faciliten el análisis de los efectos económicos y sociales de las actividades del gobierno.
- Segundo. Las cuentas deben facilitar la formulación de los programas que elabora el gobierno para cumplir sus funciones.
- Tercero. Las cuentas presupuestarias deben contribuir a una expedita ejecución del presupuesto.
- Cuarto. Las cuentas presupuestarias deben facilitar la contabilidad fiscal.
Lo que caracteriza al sector gubernamental es el hecho de poseer poderes coercitivos respectos de las personas que trabajan en las entidades que lo componen.
Los organismos que pertenecen al sector gubernamental, deberían cumplir dos requisitos:
Actuar como instrumento de aplicación de las decisiones de una entidad política, careciendo de facultades para decidir por su propia cuenta.
Estar fiscalizados por órganos políticos y que sus recursos sean administrados con fines definidos por esos órganos.
CLASIFICACIÓN SEGÚN EL OBJETO DEL GASTO
La clasificación por objeto del gasto es la base del llamado presupuesto tradicional o presupuesto enumerador del ítem. En este presupuesto los conceptos de gasto suelen desglosarse ampliamente. Si reflexionamos no se diseña la sustancia de la planeación y control estratégico del sector público, mismo que proponemos con el siguiente enfoque:
Si se toma un plan programático, por ejemplo, la “salud de la población”, el plan se integra de la siguiente forma:
Es decir, para la misión de lograr una población sana y productiva se diseñan acciones como:
- Dotar de recursos a las universidades para fomentar y proveer de médicos, tanto generales como especialistas en las dolencias que afectan a los habitantes del país y que propician ausentismo escolar y laboral con un impacto negativo en la oferta, que al no alinearse con la demanda obligan a elevar los costos, lo cual genera inflación y la importación de productos de bienes y servicios con la consiguiente salida de divisas.
- Construir hospitales para generar empleo en la industria de la construcción, tanto directa como indirecta.
- Fomentar la investigación, innovación en el sector de la salud, convirtiendo esta noble profesión y a la región en un polo importante, pero con impactos en otros como en la hotelería, restaurantes y estos en las pymes que venden productos o insumos para la transformación de alimentos, etcétera.
Se dice fácil, pero se torna en un fenómeno “complejo” una sola acción de la gestión pública que interactúa con el gestor privado, por lo que no es correcto decir que los programas públicos parten de los gastos de los años pasados, sería una gestión sin visión; es decir, con alucinación y en contra de los estrategas de las políticas públicas, políticas de Estado y, por lo tanto, de un desarrollo sustentable que tanto requiere el país.
CONCLUSIÓN
Hablar de gestión pública es sinónimo de transitar de “politiquería perversa” que daña a nuestro México y al mundo hacia un visionario y profesional gestor que con ayuda de estrategias públicas, permita un cambio estructural y coyuntural en vías de que se logre:
- Bienestar del Estado.
- Distribuir con equidad la riqueza.
- Extirpar la pobreza alimentaria, de capacidades, patrimonial y, sobre todo, de valores.
- Procurar un país y un mundo seguro, y amable para quienes estamos y para las futuras generaciones.
Un mundo donde se permee la igualdad y que crezca para bien. Creemos que sí se puede, solo es pensar en positivo.