L.C.P.F. Adriana Guerra Castellanos Profesora del Departamento de Contabilidad y Finanzas Tec de Monterrey, Campus Monterrey adriana.guerra@tec.mx
Entender que el pago de los impuestos es parte fundamental de nuestro rol como ciudadanos democráticos y no un mero requisito por parte del Estado requiere de un profundo cambio cultural en nuestro país. En este contexto, es necesario que comprendamos la importancia que tiene el acceso a la información y servicios públicos de calidad. Por tal motivo, surgen los Núcleos de Apoyo Fiscal en México, también conocidos como NAF, los cuales forman parte de una iniciativa de responsabilidad social universitaria, apoyada desde las administraciones tributarias, con fin de fortalecer la cultura contributiva en nuestro país.
Los NAF son un servicio de orientación y asesoría fiscal y contable totalmente gratuito, enfocado en personas físicas de baja renta y emprendedores, localizados en espacios dentro de las propias universidades. Es importante señalar que los NAF son operados principalmente por alumnos de las licenciaturas de Contaduría Pública y Derecho, quienes son previamente capacitados por personal del servicio de administración tributaria y docentes de la universidad.
Actualmente, los NAF cumplen la función de ser un puente entre las administraciones tributarias y la ciudadanía, ayudando así a la construcción de una sociedad, en la cual se eliminen las barreras entre los distintos grupos sociales en donde algunos tienen acceso a la información y contratación de profesionales especializados, y los menos favorecidos encuentran dificultades para costear dichos servicios, lo cual deriva en una desigualdad en la obtención de derechos y en el cumplimiento de las obligaciones fiscales en México.
Los NAF tienen varios objetivos fundamentales: para los alumnos, tener una vivencia práctica sobre el asesoramiento fiscal, desarrollando en ellos el sentido social de los impuestos; para los contribuyentes y emprendedores, constituyen una gran oportunidad de conocer sus derechos y cumplir con sus obligaciones fiscales, lo cual a menudo es todo un reto debido a la complejidad del sistema tributario o por la dificultad de manejar ciertas herramientas tecnológicas. No obstante, con los NAF esto se realiza en un ambiente amigable, de confianza y relajado; con el uso de un lenguaje comprensible y sin prisas. Igualmente, la administración tributaria se beneficia, al tener mayor legitimidad del sistema tributario y a un incremento en el padrón fiscal, en especial cuando el NAF sirve para formalizar pequeñas actividades económicas.
Para concluir, contar con un NAF en las universidades promueve la cultura contributiva en México y ayuda a solucionar los problemas que afectan a nuestra sociedad, al formar profesionistas con mejores competencias en la práctica contable y socialmente responsables, comprometidos con los retos de un mundo globalizado y en constante transformación.