Nuestra responsabilidad ante los nuevos retos
Claudia Elizabeth Alegría Cisneros
Azalia Félix Narváez
Estudiantes de Contaduría Pública
Universidad del Golfo de México, Campus Minatitlán
elizaalegria_90@hotmail.com
azaliafn@gmail.com
Hoy en día, existe intranquilidad entre los estudiantes por los nuevos retos que están surgiendo en la profesión contable y los cambios que se están viviendo, debido al inminente crecimiento de la cuarta transformación industrial. Esto es preocupante cuando se escucha decir que en un futuro el Contador dejará de ser necesario para la realización de actividades tan sencillas como la descarga masiva de XML, la emisión de facturas, la realización de complementos de pagos, la elaboración de los estados financieros, la determinación de los impuestos, entre otros.
Lo anterior nos lleva a ver qué nuevas oportunidades existen dentro de la profesión para que esta no desaparezca. Por ello abordaremos, desde nuestra perspectiva como estudiantes, puntos relevantes para dejar en claro que el Contador en el futuro no va a ser una leyenda urbana, sino un profesional en potencia, sin duda, muy importante en el sistema económico.
Por esta razón se necesita cambiar de manera radical la mentalidad de los estudiantes y profesionistas de Contaduría, hay que visualizarse como asesor para formar empresas sólidas, ayudándolas a su crecimiento y, por ende, a México. El Contador no solo debe cumplir con realizar registros contables o determinar los impuestos; debe ser un profesional que esté inmerso en la innovación tecnológica, aportando el activo más valioso que
tiene todo profesionista: ¡la mente!
Otro punto importante es la obtención de conocimiento por medio de capacitaciones, cursos, talleres, etc. Hay que considerar estas actividades como una inversión y no un gasto. ¿Qué significa esto? Que los profesionistas contables y futuros Contadores se adhieran al principio fundamental de la competencia profesional, en el cual es necesario mantener un conocimiento profesional y habilidades a un nivel que asegure al cliente o a la entidad para la cual se esté laborando, que recibirá servicios profesionales competentes basados en los últimos avances de la práctica. Este principio fundamental debe sembrarse en las futuras generaciones de Contadores, pues sería maravilloso llegar a todos y hacerles ver lo bello que es la Contaduría e impulsar la búsqueda de nuevos métodos de aprendizaje para estar a la vanguardia de los avances tecnológicos.
La actualización del personal docente en las universidades representa un aspecto relevante en el desarrollo del estudiante universitario, pues se busca que las universidades forjen profesionales analíticos con capacidad de tomar decisiones confiables, así como realizar el análisis, interpretación y razonamiento de información de todo ente económico. Además, hay que considerar la actualización constante, pues permite desarrollarse en el ámbito profesional.
Arnold Schönberg decía: ¡Espero que mis alumnos busquen! Porque han llegado a saber que se busca sólo para buscar. Que el encontrar es, en efecto, la meta, pero que muy a menudo puede significar también el final de esa tensión fructífera.
El alumno debe saber que en todo lo que vive está contenido su propio cambio, desarrollo y disolución. La vida y la muerte están ya en el mismo germen. Lo que hay entre ellas es el tiempo. Así, pues, nada esencial, sino sólo una medida que se llena necesariamente. Con este ejemplo aprenderá el alumno a conocer lo único que es eterno: el cambio, y lo que es temporal: la permanencia.
Por ello, es necesario empezar a cuestionarse: ¿hay futuro laboral para mí en 10 años? ¿Qué tan preparado profesionalmente estoy? Si la inteligencia artificial suplirá mis actividades, entonces ¿qué debo hacer para que no deje de laborar? ¿Cuál es mi responsabilidad en el futuro de la Contaduría? No hay que preocuparse, mejor ocuparse; el trabajo nunca se va a acabar.
Estudiantes de Contaduría y profesionistas no tengan miedo de navegar aguas poco exploradas por otros, hay que tomar ventaja de las innovaciones, ser más audaces y capaces que un sistema inteligente artificial –como es el software contable–, revolucionar lo que somos y ser creadores de resultados. Aclaren la mente y vean oportunidades donde otros ven extinción, y logren visualizarse en un mundo de oportunidades para su crecimiento profesional.
El futuro de la Contaduría se encuentra en el mejoramiento de las deficiencias, en la adaptación de los estándares financieros, en la unión del gremio y en el amor de los profesionistas hacia su profesión. El análisis e interpretación de estados financieros, análisis de costo, formulación de escenarios financieros, entre otros, serán actividades en las cuales hay que mantener mayor atención para que la profesión tenga mejor desarrollo. ¡Así que ya no pierdan más el tiempo y reinvéntense, que el futuro de la
Contaduría está en ustedes!