C.P. y M.A. Carlos Enrique Pacheco Coello
Profesor de carrera titular “C” de la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Yucatán y consultor de empresas
pcoello@uady.mx
C.P. y M.A. Antonio Emmanuel Pérez Brito
Profesor a nivel de licenciatura en la Facultad de Contaduría y Administración de la UADY y de licenciatura y posgrado en diversas universidades
cptony76@hotmail.com
C.P. Gabriel Jesús Pérez Brito
Contador Público por la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Yucatán, y Contador Administrativo en Amerijet International
gperez@amerijet.com
En los últimos años, las autoridades educativas se han focalizado en un modelo que no es nuevo, pero que es la moda en el mundo globalizado que nos toca vivir, ante las exigencias de nuestro principal socio comercial que es el estadounidense, nos referimos al “Constructivismo” que se reconoce no es malo; sin embargo, muchos colegas no le entienden y lo confunden con el disfraz de que el alumno prepara la clase, se discute y el maestro cómodamente se limita a escuchar. A lo anterior y sin que esta opinión se base en una investigación y, por lo tanto, en probar su bondad, se externarán algunas inquietudes tendentes al logro de un estudio serio y puntual.
¿Se comprende en verdad el proceso enseñanza–aprendizaje? Lo anterior, porque una cosa es enseñar, mostrar en la pizarra o poner en una diapositiva un tema magistral, y otra es que el alumno realmente aprenda y reflexione, cuestione y pueda ser capaz de innovar y tomar decisiones ante contextos parecidos a la realidad, y que quede claro que no se trata de repetir los errores de las empresas en su acontecer diario, sino de que se “debe” recalcar el hacer de ellas un activo semillero (las organizaciones) de entes competitivos, eficientes y eficaces, que generen empleos, impuestos, retorno de la inversión de los que creyeron en ella y entre otros socialmente responsables, y una manera de lograrlo es con egresados de las escuelas de negocios con mente fresca, reflexivos y éticos.
Para ello, los maestros juegan un papel importante, cuya misión es formar al profesional con las características mencionadas, por lo que deben conocer el proceso, enseñar y hacer que aprendan. Existe un dicho que señala lo siguiente: “Sí muestro (doy clase magistral), conocen; pero si construyen, aprenden”.
¿El constructivismo es el modelo ideal para las escuelas de negocios? Piensa que la perfección no existe, sólo hay un ser que lo es, por lo que tendríamos que cuestionar: ¿qué estrategia seguir?, conductismo o constructivismo. Para tomar esta decisión vale la pena la siguiente reflexión: